2 de noviembre de 2008

La Bella y El Compañerito de Banco, 2da parte

Así estaban los ánimos cuando empezamos la cursada del segundo cuatrimestre. Yo tenía instrucciones estrictas de sentarme estratégicamente para que ellos dos no quedaran uno al lado del otro. A las dos semanas tales ordenes quedaron sin efecto. De nuevo se la veía sonreír coqueteando y batiendole las pestañas a Fulanito. En mi cabeza se prendieron las señales de alarma. De una clase para otra el histeriqueo había vuelto a su relación, sin previo aviso. Claro que yo no contaba con largas charlas por msn en las que uno decía lo que la otra quería escuchar y la otra creía lo que a uno le convenía que crea.

Volvimos al jueguito del cuatrimestre anterior, que sí, que no, que nunca te decides... Tira los dados y ¡uy! caíste justo en el casillero de la serpiente, retrocede 15 espacios. Estamos de nuevo en la dicotomía de "es un tarado" pero "me puede". Aquellos/as que hayan estado en la situación como tercer interesado sabrán que es en vano explicar lógicamente que lo mejor es abrirse de la situación porque como dice el cliche, el corazón tiene razones que la razón no entiende.

Además se agregaba otro ingrediente a la mezcla: ladies and gentlemen, welcome to Denialland. "Son charlas inocentes, si, me encanta y todo, pero no me voy a volver a enganchar porque ya entendí como viene la mano". Pregunta obligada: "Entonces por qué no lo bloqueas y le dejás de hablar?" Respuestas varias: "Porque es al pedo, si igual lo tengo que ver en la facu". "Porque me gusta hablar con él, me divierto." "Porque no puedo." Esta última fue dada al borde de las lágrimas durante una conversación que creo me costó tanto a mi como a ella.

Mientras tanto, Fulanito ni lento ni perezoso, mientras mantenía esta velita prendida, buscaba otras. Encontró otra, mucho más cerca de lo que pensábamos. Todavía no sé si llegó a prenderla o si está almacenando para cuando se venga la sequía. Mi amiga dice que sí. Sea como sea, la situación de verlo haciéndose el lindo con otra y reconocerse del otro lado fue un baldazo de agua, si no helada, bastante fresca. Al principio, habitantes de denialland no hicieron pensar que lo hacia para darle celos. Pero con el tiempo resultó claro que iba más allá el asunto.

En una mezcla de "me cansé de tejer mientras te espero" y "si vos podés, yo también", mi amiga fue recolectando pretendientes que la mantenían ocupada con mensajitos de texto e invitaciones varias. Pero la mayoría no lograba hacer el salto del celular al encuentro. Hubo un par más de intentos de salida entre Fulanito y mi amiga, pero jamás hasta la fecha volvieron a concretarse. Cuando todo parecía aclarado y había una leve posibilidad de que las cosas avanzaran, hasta se los vio de la mano, él se las ingenió para desmoralizarla una vez más.

Y así llegamos a la actualidad. Ella está conociendo a otro muchacho, del que no haré comentarios porque no tengo referencias y no me gusta hablar sin conocimiento de causa. Pero cuando la última clase me mira y me dice: "Hablo dos palabras y me vuelve a poder" recé por que el muchacho nuevo la invitara a salir en ese momento... Después de todo la mejor defensa es un buen ataque...

1 de noviembre de 2008

Medicina Contra El Dolor

Si hay algo más difícil de digerir que un mensaje de Fulanito, es un mail de su novia refregandote en la cara lo felices que son como pareja.

Posibles reacciones:
1.- Pobre ilusa, si supiera... Mmmm, no, no me sale. No puedo ser forra en esta situación, no tiene la culpa de ser cornuda.
2.- Jodete si te duele, vos te metiste en esta situación solita... Algo de eso hay. No creo en el karma, pero que lo estoy pagando, lo estoy pagando.
3.- Llamar a una amiga llorando desconsoladamente... Eso y mensajitos a 3 más, necesitaba apoyo moral.
4.- Sentarte en tu cama, llorar las 4 lágrimas que tenés acumuladas, respirar profundo y recordarte que no es lo que vos querés para vos.


Una dosis de los puntos 2, 3 y 4 y estoy más tranquila. Las sabias palabras de mi amiga, más empezar a aceptar la realidad como es, más verme en un futuro pensando que tengo una relación de la cual hacer alarde mientras que mi novio anda coleccionando peines de telos a los que no fue conmigo, resultaron el tilo que necesitaba. Sólo me falta encontrar con quien salir a ponerme en pedo esta noche y estoy lista para seguir con el proceso de desligue.